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El Soplao, la nueva atracción cántabra

Una cueva recién abierta al público en un entorno de agradables pueblos y playas

2015-08-20

Autor: Daniel Cabrera
Publicación: El País

El agua y el tiempo son los autores del conjunto escultórico de formación natural que es la cueva de El Soplao, de 17 kilómetros. Bajo el suelo de Cantabria, la roca inventa formas anárquicas que desafían las leyes de la física en esta antigua mina de blenda y galena. Más al norte, el mar moldea y agujerea la costa a su gusto, y la marea es un pañuelo de mago que hace aparecer y desaparecer playas de arena fina. El Cantábrico extiende sus dominios hacia el interior en el curso de los ríos: el Nansa y el Deva, frontera natural de Cantabria y Asturias.

OTRAS ATRACCIONES EN CANTABRIA

1- Parque de Cabárceno: A 17 kilómetros de Santander se encuentra el Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Un centenar de especies animales vive en un espacio de 750 hectáreas de extensión en régimen de semilibertad, algo así como una pensión completa, ya que la alimentación es la única actividad en la que los responsables del parque intervienen. El espectacular paisaje kárstico de esta antigua mina de hierro a cielo abierto es un entorno perfecto para un recorrido en coche.- www.parquedecabarceno.com

2- Santillana del Mar: Un perro se mete en una cavidad y así se descubre el tesoro más importante del arte prehistórico, la cueva de Altamira, a dos kilómetros de Santillana del Mar. Ocurrió en 1875. Hoy cerrada al público, hay que conformarse con visitar la réplica o neocueva, según el espléndido proyecto del arquitecto Juan Navarro Baldeweg, que permite obtener una impresión exacta de la manada de bisontes que corre por el techo del Gran Salón de la cueva. En Santillana es obligado viajar en el tiempo paseando la Y griega que forman las casonas del casco antiguo.

3- Comillas: Es sabido que Antonio Gaudí era un hombre más espartano que hedonista. Se hace difícil imaginar que un tipo con su austeridad tuviera caprichos, aunque las imaginativas formas de sus edificios sugieran otra cosa. Así, El Capricho es como se llama el fantástico edificio que el marqués de Comillas le mandó construir en este pueblo de veraneo. La Universidad Pontificia se alza sobre la costa, observada desde el cementerio de San Cristóbal por el Ángel exterminador que esculpió Llimona.

4- Picos de Europa: Del cielo a la tierra en cuatro minutos, y viceversa. No es para tanto, pero casi es lo que ofrece el teleférico de Fuente Dé, que en tan mísero periodo de tiempo recorre unos 760 metros verticales sobre el imponente macizo central de los Picos de Europa. El mirador del Cable es punto de partida para cualquier excursión.

5- Arte en Esles: La tercera edición del Festival Artesles ofrece a los visitantes la consolidación de una curiosa propuesta que integra arte y paisaje en la pequeña localidad de Esles, en el interior de Cantabria, a unos kilómetros de Sarón. El reto creativo consiste en fundir en uno el entorno con las obras artísticas, transformando ermitas, prados, casas o incluso un viejo lavadero o una leñera en espacios que ya no albergan, sino que son parte de las obras. El festival permanecerá en la localidad hasta septiembre.

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