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Picos de Europa

La vista, el oído, y el olfato son, de los cinco sentidos, los primeros que despiertan ante los Picos de Europa

2012-12-05

Publicación: qtravel.es
Fecha: 11 de octubre de 2011


Los Picos de Europa forman parte de la cordillera cantábrica, con 64.660 ha de superficie se extienden por las provincias de Cantabria, Asturias y Castilla-León. El principal acceso por Cantabria a los Picos de Europa se realiza a través de la autovía del Cantábrico A-8 hasta Unquera, donde se debe tomar la carretera nacional N-621 que se dirige a Potes, capital de la comarca de Liébana. Esta carretera discurre por el espectacular desfiladero de La Hermida. Desde Potes se puede coger la carretera autonómica CA-185 hasta Fuente Dé, uno de los accesos al Parque Nacional y donde se ubica el famoso teleférico.

La geología del Parque es singular y todas las rocas pertenecen a la Era Primaria o Paleozoico, o lo que es lo mismo, se formaron hace más de 230 millones de años. Entonces existía sobre los Picos de Europa un mar no muy profundo, cuyos fondos fueron depositando sedimentos carbonatados y restos de organismos que, tras distintos procesos de transformación, dieron lugar a las masas calizas de diferentes tipos que hoy componen esta región. En los Picos de Europa se dan prácticamente todos los pisos de vegetación: colino, montano, subalpino y alpino; lo que quiere decir que en este Parque Nacional se pueden encontrar gran variedad de formaciones vegetales: encinares en los cantiles rocosos, bosques de ribera, bosques mixtos, robledales, hayedos y matorrales. La situación de los Picos de Europa entre dos regiones, la Eurosiberiana y la Mediterránea, contribuye a la riqueza de su fauna. Probablemente la fauna de este Parque Nacional sea la más rica y variada de toda Cantabria.

Teleférico de Fuente Dé
La vista, el oído y el olfato son, de los cinco sentidos, los primeros que despiertan ante los Picos de Europa. La Cordillera, con altitudes de más de 2.600 metros, abruma al visitante al contemplarse como algo insignificante en la planicie del valle al compararse con el entorno. El oído se sobrecoge ante el rumor del silencio y el olfato despierta ante la delicadeza del olor a monte, a castaño, a roble, a nogal, a avellano…. o simplemente a hierba.

Además del acceso en quad, 4×4 o a pie, Cantabria cuenta con un atractivo sistema de ascenso a los Picos de Europa, se trata del Teleférico de Fuente Dé que salva un desnivel de 750 metros y sitúa al viajero en la cota de 1850 metros. Una vez en la cima de la montaña se puede practicar senderismo, escalada, esquí de travesía y alojarse en el Refugio de Áliva, un hotel en plena montaña, a cuatro kilómetros del Teleférico. La zona es rica por su entorno natural y por su gastronomía, es un lugar excelente para encontrar restaurantes y mesones en los que degustar los productos y platos autóctonos; descubrir rincones para el remanso y caminos y veredas para recorrer a pie, en bici o a caballo.

RUTAS POR LOS PICOS Y LA COMARCA DE LIÉBANA
El principal atractivo de la visita a los Picos de Europa, es el de la realización de alguna de las rutas que se proponen tanto desde las Oficinas del Parque Nacional como desde diversos puntos turísticos de la comarca de Liébana, como por ejemplo el conocido Hotel del Oso en Cosgaya. Así pues, el parque ofrece una salida diaria desde seis puntos distintos (Fuente Dé, Espinama, Mogrovejo, Brez, Bejes y Cosgaya), con duraciones de entre 3 y 5 horas y con dificultades entre baja (la mayoría) o media y alta. Desde el Hotel del Osos, se pueden realizar rutas en 4×4 o a pie, siempre partiendo de Cosgaya, hasta seis son las rutas que te permitirán disfrutar del paisaje a gran altura, observar la vegetación y arboleda del bosque (robles, abedules, fresnos, hayas y avellanos) sin olvidar la arquitectura y el arte antiguo como el internacionalmente conocido Monasterio de Santo Toribio de Liébana, cuna de los códices medievales de Los Beatos de Liébana.

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